El 25 de mayo 2014 se celebran en España las elecciones al Parlamento Europeo. La Plataforma del Voluntariado de España -junto a diferentes representantes de la sociedad civil- ha participado en el debate sobre la Europa que queremos construir. Como resultado, este es el manifiesto público que se ha elaborado.
Nosotros y nosotras, representantes de la sociedad civil española, pedimos al Parlamento Europeo que salga de las urnas el próximo 25 de mayo de 2014 y a la nueva Comisión Europea, cuyo presidente elegirá, que se esfuercen por forjar una Europa que dé respuestas a nuestras reivindicaciones y soluciones a nuestros problemas.
Sobre la pobreza y la solidaridad
Una Europa solidaria no puede fallar a los más pobres. Es vital que se oiga la voz de las personas que viven en situación de pobreza. Para evitar la exclusión social hay que dialogar con ellos. Europa debe asumir su papel político, garantizar la igualdad en materia social y, a la par, fomentar el voluntariado y la participación de todos.
Sobre las mujeres
Es necesario que las mujeres pasen de ser actores pasivos de las políticas europeas a sujetos activos. Las redes sociales y la tecnología han de jugar un papel esencial en este camino. Europa ha de facilitar la incorporación de las mujeres empresarias y necesitamos imponer la paridad en los consejos de administración y órganos de decisión.
Sobre los trabajadores
En una Europa con 27 millones de personas desempleadas y 25 millones de personas en situación de pobreza, hay que reforzar el modelo social europeo, apostar por el empleo de calidad y poner fin a las políticas de austeridad. Es imprescindible destinar el 2% del PIB para el desarrollo de un plan industrial, I+D+i y formación, entre otros. El populismo nacionalista no es la respuesta, ésta se encuentra en más Europa, más participación y más democracia.
Sobre los empresarios
La educación es fundamental. Hay que fomentar la cultura empresarial, enseñar a los jóvenes que montar una empresa es algo bueno. Es necesario la reducción de la burocracia y evitar el exceso de legislación para poder ser competitivos en el mundo. Los empresarios necesitan soluciones – formación, financiación, simplificación – y no se puede esperar al año 2020.
Sobre los jóvenes
La generación de Erasmus, de los vuelos baratos, del euro, etc. es europeísta pero crítica. Europa es un referente pero ya no vale sólo que la UE haya traído la paz, sino que tiene que dar respuestas concretas a los jóvenes, sobre todo en materia laboral.
Sobre lo institucional
Para salir de la crisis, es necesario fortalecer la unión económica. Eso implica la unión bancaria, un nuevo papel del BCE, un FMI europeo y eurobonos. Es imprescindible luchar contra el fraude y los paraísos fiscales. Es necesario el refuerzo de la unión política, sobre la base de extender la democracia y la legitimidad (mayores competencias para el Parlamento Europeo, control democrático de la troika) y la participación ciudadana, combinando los principios de solidaridad y subsidiariedad y reforzando los valores europeos. Necesitamos un auténtico gobierno económico de Europa.
Sobre la diversidad funcional (discapacidad)
Para que las personas con diversidad funcional puedan ejercer el control de sus propias vidas con dignidad y en igualdad de oportunidades, se reivindica el derecho a la asistencia personal como la herramienta idónea – aún en tiempos de austeridad – que permite la plena inclusión en la comunidad y el empoderamiento como ciudadanos europeos. La UE ha de cumplir la Convención de la ONU de los derechos de las personas con discapacidad que ha firmado y ratificado.
Sobre la inmigración
Es imprescindible una lucha firme en contra del tráfico de seres humanos. La UE debe posicionarse de manera clara e inquebrantable frente a la acentuación del discurso racista y xenófobo en la UE. Necesitamos unas política legislativa sobre los derechos fundamentales, así como una legislación común de asilo e inmigración desde la perspectiva de los derechos humanos.
Sobre la política exterior
La UE tiene que hablar con una sola voz en política exterior y estar representada con un único escaño en las instituciones internacionales, apostando siempre por el multilateralismo. Europa debe desempeñar un papel mucho más importante y eficaz en el mantenimiento de la paz, la cooperación al desarrollo, la ayuda humanitaria y la garantía de la democracia y los derechos humanos en el mundo.
Sobre la cultura
Hay que garantizar el derecho a la cultura dentro y fuera de nuestras fronteras. En Europa hay que vincular más estrechamente la cultura a la educación. Europa debe luchar contra la piratería.
Sobre la ciencia y la investigación
La UE precisa de una normativa común para todos los Estados Miembros en materia de ciencia, especialmente en lo relativo a la salud. Los recursos económicos para la ciencia deben ser amplios, constantes, gestionados con criterios científicos y garantizados a largo plazo para prevenir enfermedades graves, salvar vidas y evitar la fuga de cerebros. Conviene animar a los europeos para que haya más donantes de órganos.