Cuando una ONG recibe una donación material sea de ordenadores, ropa, libros o cualquier otro artículo, lo habitual es que sea para darle un nuevo uso con el consiguiente ahorro en su adquisición. Pero no siempre es así, a veces lo recibido debería haber sido reciclado y no donado. Donar en especie no es reciclar y te explicamos por qué. Donar en especie es Reutilizar
Son de todos conocidas las 3R (Reducir, Reutilizar, Reciclar) que contribuyen a la disminución de residuos y al cuidado de nuestro planeta.
Donar algo en especie a una ONG está ligado a la segunda “R”: Reutilizar. Donamos lo que está en buen estado para que pueda ser utilizado de nuevo. Por ejemplo, ropa para que llegue a familias y personas que la necesitan a través de programas de entrega social, o bien para que sea vendida de segunda mano generando así recursos para apoyar proyectos de la ONG.
Las empresas renuevan sus equipos y donan ordenadores o terminales móviles que pueden ser utilizados en programas de formación, aulas o por los equipos de trabajo de ONG.
La clave es que, se done lo que se done, pueda ser fácilmente reutilizado. En algunos casos puede requerir una cierta puesta a punto, pero no tendría sentido que implicara un mayor gasto que comprar un producto similar totalmente nuevo.
Para reutilizarse debe estar en perfecto estado
Es lógico pensar que si el objetivo es que algo se reutilice para empezar debe estar completo y funcional. Volviendo a los ejemplos anteriores, los ordenadores que dona la empresa deben tener unas características mínimas que permitan su uso en un entorno de trabajo o formación. No son reutilizables equipos tan antiguos que no soporten un software estándar de oficina. O si hablamos de ropa, aquella que está rota o desgastada no podrá ser ni vendida ni entregada a otras personas.
Donar materiales que no están en estado de uso no solo no es útil para la entidad social, sino que además genera costes añadidos
Lejos de ayudar, estas donaciones absorben tiempo del personal de la organización para valorar, clasificar y finalmente descartar los bienes no utilizables. Además, generalmente, conllevan unos gastos adicionales para proceder al correcto reciclado de los bienes recibidos. Por ello las ONG son cautas a la hora de aceptar donaciones en especie.
Un ejemplo que nos comentan las ONG Acreditadas son las campañas de recogida de juguetes usados que suelen organizarse en Navidad. Clasificar los juguetes, verificar que están completos y en perfecto estado, agruparlos por edades, verificar que son aptos para los niños atendidos por la ONG es un trabajo que requiere mucha gente y mucho tiempo. El resultado suele ser que una gran parte de los juguetes deben ser rechazados por incompletos (el muñeco sin un brazo, o el puzle sin una pieza) o inadecuados para sus beneficiarios (por sus edades, las habilidades requeridas para su uso, o la temática). Por ello, si vas a donar juguetes, dedica un tiempo a clasificarlos. Separa lo que está en perfecto estado, completo y utilizable para donar, de lo que debe ir al punto limpio para ser reciclado.
Antes de donar, mejor preguntar
Uno de nuestros consejos para colaborar con ONG, quizá el que más repetimos, es informarse antes. Y para donar algo que tenemos en casa o en la oficina también aplica.
Lo primero es identificar qué ONG recoge y reutiliza los materiales que tenemos previsto entregar. Ya hemos hablado de las tiendas de ropa de segunda mano de Madre Coraje o Cudeca. Otro ejemplo es la Fundación Quiero Trabajo que recibe donaciones en especie de ropa de empresas de distribución para sus programas de empoderamiento y apoyo al empleo de mujeres.
Cuando se trata de materiales específicos como puede ser equipamiento médico, pongamos el ejemplo de un ecógrafo, es importante contactar con entidades especializadas. Desde aquí podemos pensar que es una pena que ese equipo casi nuevo no pueda ser utilizado en otro país. Pero puede ser más caro y complejo enviar algo desde España que comprarlo en destino. También hay que tener en cuenta los requisitos de instalación, la formación necesaria para el uso del equipo, sus costes de mantenimiento, disponibilidad de piezas de repuesto… No todas las ONG tienen la capacidad de realizar envíos, o a veces dependerá del volumen. Se puede plantear el envío de un contenedor con varios ecógrafos, pero no tendría sentido enviar solo uno. Nada como hablar con ONG del ámbito de la salud para explorar las posibilidades.
Consultar antes con las ONG puede ahorrar mucho trabajo y decepciones tanto al que recibe como al que dona
En varias ocasiones hemos recibido las llamadas de personas que han organizado una recogida de ropa de abrigo para enviar a campos de refugiados al llegar el invierno. Nos preguntan qué ONG lo recogerá. Como en el caso del ecógrafo, puede ser mucho más caro, largo y complejo enviar esas maletas que comprar ropa de abrigo en la zona. Si antes de organizar la recogida hubieran hablado con las ONG que trabajan en campos de refugiados hubieran podido enfocar su colaboración por una vía más eficiente.
Reciclar también es una opción
La última “R” también es una buena opción. Aquello que no está en buen estado, o aquello que es más complejo reutilizar, puede transformarse si se lleva al sitio adecuado. Con los materiales reciclados se generan nuevos productos con un menor consumo de materias primas.
Reciclar es cada vez más sencillo porque en todas las ciudades tenemos una red de puntos limpios y hay entidades especializadas para el reciclaje de diferentes materiales, móviles, bombillas, capsulas de café, y un largo etcétera. También algunas ONG han hecho del reciclaje y la gestión de residuos su actividad para la generación de empleo para los colectivos con los que trabajan. Es el caso de AMICA y de Madre Coraje.
Si te planteas donar en especie comprueba que está en condiciones de ser utilizado de nuevo, infórmate sobre qué ONG pueden reutilizarlo y contacta antes para confirmar cómo y dónde entregar los materiales. En nuestro buscador puedes encontrar ONG por ámbito geográfico y de actividad. Para donaciones desde empresas puedes ponerte en contacto con nosotros aquí.
Y recuerda, si no se puede reutilizar, lo mejor es reciclarlo correctamente.
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