Desde el pasado viernes el Centro de Desarrollo Infantil de Fundación DFA cuenta con unas nuevas herramientas para sus sesiones gracias al convenio de colaboración firmado entre Fundación San Valero y Fundación DFA. Unas herramientas que, además, permiten realizar sus terapias y tratamientos de una forma lúdica.
Se trata, por un lado, de dos vehículos adaptados a las necesidades de los niños y niñas por el alumnado del Centro San Valero (gracias al convenio de colaboración firmado por Grupo San Valero y Fundación DFA), el cual recogió dichas necesidades en reuniones previas mantenidas con el equipo de Desarrollo Infantil.
Unos meses de trabajo que se han visto culminados con la entrega de los vehículos. Entre las adaptaciones se incluye la conducción desde un joystick o una tablet, la posibilidad de enviar al vehículo comandos por voz, o sensores que detectan obstáculos.
Y, por otro lado, el Centro de Desarrollo Infantil también recibió un medidor de concentración desarrollado a su vez por el alumnado del Centro San Valero. Su funcionamiento se basa en la medición de ondas cerebrales a través de un “casco” con un sensor que envía dicha información a un segundo dispositivo que traduce esas señales en luz, permitiendo establecer el grado de concentración mediante un sistema de colores.
A los niños y niñas de atención temprana esta herramienta les ofrece la posibilidad de trabajar de una forma diferente y divertida durante las sesiones. Y para el alumnado del Centro San Valero ha supuesto todo un reto en cuanto al diseño e implementación de las adaptaciones. Y, además, un extra de motivación, ya que, como ellos mismos afirman, “no es un mero trabajo para obtener una nota, sino que es un trabajo que tiene una aplicación real, y, lo que es más importante, esa aplicación real va a ayudar a niños y niñas en su desarrollo”.
Fuente: Fundación DFA